Oscar Guerrero / Metapolítica
Morelia, Michoacán.- A 42 días de dejar el cargo, el gobernador Silvano Aureoles Conejo se enfrenta a pendientes que superan los mil millones de pesos con diferentes sectores, entre los que destaca el educativo, donde su administración reporta un déficit de 5 mil 781 millones 405 mil 434 pesos.
La carga financiera inmediata para Aureoles Conejo se traduce en un monto de mil 182 millones de pesos, de acuerdo con información del secretario de Finanzas y Administración del Estado, Carlos Maldonado Mendoza, quien hace apenas unos días dio a conocer que el gobierno silvanista solicitaría a la Federación una ampliación presupuestal de cuatro mil millones de pesos, pues sólo así, reconoció, se le podría hacer frente al sinfín de adeudos que arrastra el Ejecutivo estatal.
Pese a que el mayor problema económico para Silvano Aureoles se concentra en la nómina educativa, la crisis financiera del estado ha alcanzado a los Poderes Judicial y Legislativo, donde, hasta hace unos días, se reportaban pendientes de 50 millones y 90 millones 62 mil pesos, respectivamente.
Por si fuera poco, se anticipa que el gobierno emanado del Partido de la Revolución Democrática (PRD) estaría legando un déficit presupuestal que asciende a los 13 mil millones de pesos, de acuerdo con el gobernador electo, Alfredo Ramírez Bedolla, aunque, con base en información de la Secretaría de Finanzas, este no rebasaría los 6 mil 954 millones 997 mil 543 pesos.
Nómina educativa, el principal pendiente
Con base en información proveniente del Gobierno del Estado, la crisis financiera de la entidad se desprende de los adeudos que imperan en el sector educativo, a donde se destinaría la mayor parte de los 4 mil millones de pesos que la administración silvanista pretende gestionar ante la Federación.
Este problema, señaló el secretario de Finanzas y Administración del Estado, Carlos Maldonado, respondería al histórico déficit que enfrenta el sector educativo, cuyos alcances, de acuerdo con las últimas proyecciones presupuestales, supera los 5 mil millones de pesos.
En medio de este escenario, el responsable de las finanzas estatales precisó que, tan sólo en lo que respecta a la educación de nivel básico, el adeudo inmediato que el Gobierno de Michoacán enfrenta con el sector asciende a 650 millones de pesos, entre pendientes en salarios, bonos y prestaciones.
Ante ello, el dirigente de la Coordinadora Nacional de los Trabajadores de la Educación (CNTE) en Michoacán, Gamaliel Guzmán Cruz, detalló que producto del presupuesto deficitario que planteó el Ejecutivo estatal y que aprobó el Congreso de Michoacán en 2021, para cubrir pendientes en el nivel básico faltarían 2 mil 800 millones de pesos.
A estos problemas económicos se suman otros mil 50 millones de pesos que, de acuerdo con el líder del Sindicato Único de Empleados de la Universidad Michoacana (SUEUM), Eduardo Tena Flores, se tendrían que liberar para cubrir la nómina de la máxima casa de estudios del estado, de cara al cierre de año.
Los pendientes no acaban ahí. Con base en declaraciones del presidente de la Coalición de Sindicatos y Trabajadores de Educación Superior, Gerardo Bolaños Jiménez, entre los tecnológicos federales y las instituciones de educación tecnológica descentralizada, se sumaría otra carga económica de 650 millones de pesos.
En respuesta a la crisis que aqueja a este sector, el titular de la Secretaría de Finanzas ha insistido en que dicho problema sólo se podría solucionar si el gobierno de Andrés Manuel López Obrador responde por la federalización de la nómina magisterial; sin embargo, dicho acuerdo se ha reducido a una aportación federal del 34.4%.
Poderes Ejecutivo, Legislativo y Judicial, inmersos en crisis
De cara al cierre de año, los problemas financieros del estado han alcanzado a los poderes Ejecutivo, Legislativo y Judicial, pues también en estos se concentran pendientes que han derivado en la retención de salarios para sus trabajadores.
En lo que respecta al Poder Ejecutivo, Maldonado Mendoza detalló que, tan sólo en gasto operativo y nómina, la administración liderada por Silvano Aureoles requiere en lo inmediato de mil 172 millones de pesos.
A este se suma el Legislativo, donde, de acuerdo con la diputada presidenta de la Mesa Directiva del Congreso del Estado, Yarabí Ávila, la Secretaría de Finanzas y Administración presenta un adeudo de 93 millones 62 mil pesos.
Ello, explicó la legisladora, ha derivado en que diputados y trabajadores, tanto sindicalizados como de confianza, se estén enfrentando a retrasos en el pago de sus respectivas quincenas, sin que exista una respuesta efectiva por parte del Gobierno de Michoacán.
“Todavía tenemos obligaciones pendientes con empleados, diputados y demás por los pagos tardíos que no ha realizado el Ejecutivo, en este caso la Secretaría de Finanzas y Administración del Estado, y vamos a esperar a que lo hagan, ya hemos hecho las peticiones de manera formal e informal, pero no hemos tenido respuesta hasta el momento”, declaró en una entrevista concedida el pasado 16 de agosto.
En el Poder Judicial la problemática es exactamente la misma. De acuerdo con la lideresa del sindicato del Poder Judicial del Estado, Julié Álvarez Guzmán, a la instancia responsable de procurar justicia en Michoacán se le adeudarían unos 50 millones de pesos, correspondientes a la segunda quincena de julio y a la primera de agosto.
“Entendemos que por los problemas financieros que existen en el Gobierno de Michoacán no han sido depositadas la segunda quincena de julio y la primera de agosto; sin embargo, el Consejo General del Poder Judicial no ha suspendido el pago de salarios, gracias a esquemas de ahorro y austeridad aplicados por el órgano”, señaló en entrevista.
Proveedores también resultan afectados
Aunado a los adeudos antes expuestos, el próximo gobierno estatal heredará del de Silvano Aureoles Conejo una deuda a proveedores que asciende a cuando menos 7 mil millones de pesos, confesó el secretario de Finanzas, Carlos Maldonado.
El funcionario estatal refirió que en 2015 dicho pendiente ascendía a unos 14 mil millones de pesos, de manera que la administración silvanista habría reducido este pendiente en un 50%.
“Cuando el gobernador Silvano recibió en el 2015 eran 14 mil millones de pesos de pasivos circulante con proveedores de diversa naturaleza, y ahora se va a quedar con esos 7 mil millones de pesos, que veo difícil que nosotros paguemos”, precisó al ofrecer una conferencia de prensa haca un par de semanas.
En aquella ocasión, Carlos Maldonado reconoció que de este pendiente con proveedores, “seguramente vamos a heredar una parte, sin duda”, refiriéndose a la deuda de los 7 mil millones de pesos que Silvano Aureoles legará a la próxima administración estatal.
Derivado de las problemáticas aquí expuestas, Silvano Aureoles acudió a la Federación hace unos días para, sin éxito, gestionar ante el gobierno del presidente Andrés Manuel López Obrador, pese a la enrarecida relación que hay entre el Ejecutivo estatal y la Federación.
