Por Rosmi Bonilla
“Leyes innecesarias debilitan leyes necesarias”.
—Montesquieu
Muy interesante resulta la lectura del Índice de Burocracia en América Latina 2022 que elabora y publica The Adam Smith Center for Economic Freedom en colaboración con México Evalúa y 10 Think Thanks de igual número de países de la región.
Y resulta interesante porque mide (con números) y ponen en evidencia lo que el economista mexicano Luis de la Calle denomina “economía de la extorsión” y que consiste en que, para salir adelante, las micro y pequeñas empresas deben enfrentar conflictos de interés, menor eficiencia en el quehacer empresarial, menores oportunidades para ideas innovadoras, una costosa carga financiera y corrupción debido a la excesiva regulación.
Y es que mientras los trámites para que una micro y pequeña empresa opere de manera legal sean engorrosos y cambiantes (a veces los trámites se modifican cada trienio o cada sexenio sin previo aviso y sin brindar mayor información a los solicitantes), se invierten más horas y más recursos económicos en cumplirlos.
Ejemplo de ello se da en el apartado que corresponde a México en el Índice. En nuestro país las micro y pequeñas empresas destinan 506 horas en promedio al cumplimiento de trámites, es decir, 21 días completos o un tercio del total de horas laborables en el país. Sin embargo, si se trata de una micro o pequeña empresa del sector primario (agricultura o ganadería) destinará 150 horas extras para cumplir con los trámites que se imponen para operar de manera legal.
Michoacán es un estado con vocación primaria en su actividad económica, por lo que los productores necesitan 27 días completos (trabajando 24 horas) para cubrir los trámites que se requieren para operar legalmente.
Esta situación propicia dos grandes oportunidades de corrupción: la primera, basada en los cambios sin aviso y sin informar a los usuarios, provoca que; al desconocer los requisitos, tiempos y ventanillas para realizar los trámites; los usuarios terminen por pagar sobornos a fin de agilizarlos.
En Michoacán, las cámaras de comercio han denunciado que los requisitos, tiempos y ventanillas para realizar trámites de licencias y concesiones para operar no son claros, no están a disposición para consulta y ello provoca que al llegar a las ventanillas, se les pidan requisitos que no corresponden ya sea por desconocimiento del propio servidor público o con dolo para retrasar el trámite.
La segunda oportunidad para la corrupción está en la necesidad de contratar gestores que agilicen los trámites. Estos gestores, señala el Índice de Burocracia en América Latina 2022, muchas veces realizan su labor a través de vías informales, opacas y, en ocasiones, ilegales favoreciendo el soborno, el conflicto de interés y hasta el abuso de funciones.
La mejora regulatoria no es una simple ocurrencia es, como se ve, una necesidad. Sin duda, la Comisión Nacional de Mejora Regulatoria tiene un gran reto por delante.
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