La declaración se produjo días después de que el regulador de medicamentos de la Unión Europea dijera que también está revisando posibles casos de coágulos de sangre en personas que recibieron la inyección de Johnson & Johnson.
La Organización Mundial de la Salud aclaró que estas suspensiones son una medida de precaución, y que se deben seguir usando las vacunas AstraZeneca-Oxford mientras se investigan los casos.