La medida contrapone abiertamente el ruego de la Organización Mundial de la Salud, que en julio de este año pidió priorizar la cobertura mundial antes que las terceras dosis en los países que estuvieran en condiciones de hacerlo.
La OMS reclamó suspender la aplicación de dosis de refuerzo contra el COVID-19 hasta que todos los países tengan vacunas, pero los tres países de América Latina ya avanzaron hacia las terceras dosis.
La campaña es para vacunar por tercera ocasión a las personas mayores de 60 años de edad. El presidente israelí, Isaac Herzog, uno de los primeros en recibir esta nueva dosis, se dijo “orgulloso” de que Israel sea el primer país del mundo en tomar esta decisión.
La empresa asegura que otra inyección en un plazo de 12 meses podría aumentar drásticamente la inmunidad y dar protección frente a la última y preocupante mutación del coronavirus, la variante delta.