“López” es uno de los apellidos más comunes de nuestra realidad demográfica mexicana. Hay siete millones 186 mil 654 mexicanos que comparten uno de los siete apellidos más comunes en el padrón electoral: Hernández, López, García, González, Martínez, Rodríguez y Chan, según el IFE.
De acuerdo con las estadísticas del padrón electoral por nombre, apellidos y domicilios, actualizadas al 31 de enero de este año y disponibles en la página de internet del Instituto Federal Electoral, hay un total de un millón 69 mil 750 López.
Casi la mitad de los López, están registrados en Chiapas. Los demás habitan, según el padrón, en Oaxaca, Sinaloa, Sonora y Nayarit. Michoacán concentra al mayor número de personas con apellido García en el padrón, con un total de 247 mil 400 personas.
Por donde se le quiera ver, ser un López en México, es contar con amplias ramificaciones familiares distribuidas por todas las entidades.
Por ello, aun no podemos entender la insistencia de los asesores y alquimistas de la comunicación del PRI y del PAN para categorizar a Andrés Manuel sólo en el casillero de su apellido paterno, y evitar llamarlo por la composición con su apellido materno, que es Obrador.
En esas “estrategias” millonarias que han pagado los cuarteles de campaña del PAN (en el 2006 siempre se dirigieron a él como el Señor López), y ahora en este 2018, el PRI insiste en sólo referirlo como “López”, a fin de evitar los nombres que más se conocen de él y su persona, que es la conjunción de los nombres Andrés y Manuel.
En cambio, el PRI lanzó costosas campañas de identificación para dar a conocer a su poco célebre candidato, que ostenta el nombre de pila de José Antonio Meade, pero que para los publicistas se debe de llamar “Pepe Mid”, a fin de traducir el origen irlandés del apellido Meade. Se pronuncia Mid, como se pronuncia López, pero para la gente los conocen como Andrés Manuel y como José Meade.
Resulta curioso adivinar las intenciones de los publicistas del PRI para tratar de posicionar el apellido y la historia pulcra de un habitante sempiterno de las burocracias doradas que carece de alma social.
“Pepe Mid” y el Señor López recorren el país, pero en caravanas políticas muy diferentes, ya que para el ex secretario de Hacienda, el ir en pos del voto es una experiencia novedosa y de la cual no tiene mayores elementos para poderse desplegar.
En cambio “López” tiene recorriendo el país desde el 2006, y ya visitó los más de dos mil municipios del país hasta en dos ocasiones. La diferencia es abismal.
“Mid” apenas está conociendo al México del cual sólo sabía por la fría presencia de los números escritos en los reportes que leía en su escritorio de caoba; López es ya un personaje habitual en las plazas del país.
El tiempo apremia, por ello los publicistas del PRI tendrán más trabajo que hacer para lograr que su candidato crezca y mejor deberían de dejar de perder el tiempo de referirse a AMLO como “López”, ya que en México los “López” son muchos más, millones de personas más que los Meade.
@gaaelico
El retorno del señor López | Antonio Aguilera
