Zuhey Medina / Metapolítica
Morelia, Michoacán.- “No se aprobó una reforma para militarizar el país”, aseguró Silvano Aureoles Conejo, quien sostuvo que las fuerzas armadas tienen 18 años en la calle, por lo que se trata de un debate falso en el que cayó la oposición; aseguró que no están en contra de su uso, ni él, ni Antonio García Conejo.
El exmandatario fue cuestionado en encuentro con medios, sobre los rumores que señalan un acuerdo para que su medio hermano inclinara su voto en el Senado a cambio de liberar a Aureoles Conejo de las denuncias por presuntos desvíos de más de 12 millones de pesos durante su gestión.
Sobre esto, indicó que el senador ya ha explicado y que él no tendría por qué hacerlo, aunque detalló que Miguel Ángel Mancera fue quien le informó que antes de votar hablaron con el presidente del PRD y revisaron el tema. El acuerdo fue que, de aceptar las modificaciones propuestas, votarían a favor.
“Entonces los dejaron en la libertad [de votar] después pues ya el presidente del partido reaccionó de otra manera”, agregó.
Tras las acusaciones de que se trata de militarización el ampliar hasta el 2028 el uso de las fuerzas armadas en tareas de seguridad pública, respondió que eso es un debate falso y una trampa del gobierno federal en la que cayó la oposición: “se enganchó en ese debate”.
Sin embargo, señaló que la discusión debería centrarse en los avances rumbo al año quinto del gobierno federal, en los que “no hay una estrategia para hacerle frente a la criminalidad”.
Para el exgobernador, el gobierno federal se fue “por la ruta fácil” al usar a soldados y marinos en estas tareas, provocando una merma en las policías municipales.
“El 115 constitucional mandata a los gobiernos municipales a hacerse cargo de la seguridad en su territorio ¿Con qué ojos? No hay recursos, está invertida la pirámide. Por cierto, en la cosa esta que reformaron hay un apartado específico que regresen los recursos a estados y municipios, porque los desaparecieron”.
A decir de Aureoles Conejo, otra trampa fue mostrar que la oposición está en contra de las fuerzas armadas, o de que el ejército cuide a la sociedad: “aguas con eso porque no es así”.
“Del 2012 al 2015 [Michoacán] se mantuvo esto en pie, porque intervino el Ejército y la Marina, y lo hicieron porque los empresarios del mundo le dijeron a Enrique Peña Nieto que ‘qué pasaba con un estado, que estaba en la ingobernabilidad’”.
Con todo, adelantó que de ser electo en el 2024 buscaría cambiar la estrategia de seguridad pública, en la cual ya está trabajando con expertos, “empezando con gente de las fuerzas armadas que no están de acuerdo con lo que está pasando”.
