Por Héctor Tapia
Ciertamente hace falta todavía que los partidos políticos definan sus políticas de alianzas para el proceso electoral 2023-2024, pero eso no quita que ya sus activos, más los que están interesados en ser postulados, estén construyendo al interior de sus partidos para ser tomados en cuenta para la contienda.
No hay que perder de vista que en una eventual alianza las reglas internas de los partidos quedan prácticamente por debajo de las reglas establecidas entre los partidos coligados; es decir, los procesos internos quedan en segundo plano, y dan paso a los acuerdos entre los partidos para seleccionar a quienes les representarán.
Ahora, en el caso de las diputaciones federales y las candidaturas al Senado, estas son definidas a nivel nacional por los propios partidos, y no por las dirigencias o consejos estatales.
En este contexto, en esta ocasión, valdría la pena poner sobre la mesa los nombres de quienes, en el caso del Senado, podrían saltar a la escena buscando ser los postulados para llegar a la Cámara Alta, particularizando cada partido.
En esta columna se enlistarán los nombres de quienes suenan o han alzado la mano para ser contemplados por parte del Partido de la Revolución Democrática (PRD); los cuales, insisto, tendrán que entrar al filtro de la eventual alianza opositora, de concretarse.
Silvano Aureoles Conejo, apostaría más por la vía plurinominal, en caso de no concretársele la candidatura a la presidencia por la alianza opositora con el PRI y el PAN, que tanto pretende. Incluso podría pretender la doble vía.
Aunque también cabe el escenario de que el PRD no acepte finalmente el desdén y pisoteo que le ha propinado esas dos fuerzas políticas y no sume a ellos, por dignidad.
Está también Antonio García Conejo, actual senador, que podría buscar la reelección; que entre sus negativos pesa no sólo ser medio hermano del ex gobernador, múltiples veces señalado por presuntos actos de corrupción, desvíos y desfalcos. Sino que además se le ha señalado por imponerse en el mismo PRD por pretender ocupar o tener influencia en las distintas posiciones del partido en Michoacán.
Otro activo que también pretende o buscaría esta postulación es Mauricio Prieto Gómez, actual legislador federal; el empresario gasolinero ha sido diputado local por el mismo PRD, y también Jefe Regional de Gobierno del estado en la región de Puruándiro.
Y también se ha apuntado Francisco Huacus Esquivel, legislador federal de reelección, quien de venir del Partido del Trabajo, apenas en esta legislatura, poco después de que inició, se decantó por ingresar a las filas del PRD, donde ha tenido su actividad política reciente.
Entre los perfiles de mujeres que el PRD podría impulsar hay varios que se enlistan, entre las que destacan Guadalupe Díaz Chagolla, actual diputada local, y las diputadas federales Edna Díaz y Macarena Chávez, quienes tienen retos o complicaciones similares a Francisco Huacus, no son perredistas de hueso colorado.
Por ejemplo, Macarena Chávez, viene del Partido Acción Nacional (PAN), por quien fue diputada local y alcaldesa, actualmente en esta legislatura federal fue arropada finalmente en el PRD, actualmente mantiene su activismo en esta fuerza política.
No hay que perder de vista varios aspectos relevantes, la primera es que de concretarse la alianza opositora, los términos establecidos por los tres partidos prevalecerán por encima de los procesos internos de cada fuerza política. Donde el PAN y el PRI pelearán por las postulaciones a partir de los últimos resultados electorales y también de las proyecciones para la siguiente campaña.
Y, adicional, tanto el PAN como el PRI, han demostrado que al PRD no le dejarán algo, alegando tener mejor reputación y preferencias electorales que el partido del sol azteca. Y ya han adelantado públicamente sus posturas al respecto. Aún quedan varios meses para que arranque el proceso electoral, y unos pocos meses más para que formalicen cualquier intención de coaligarse con otros partidos para el 2024, así que los jaloneos apenas comienzan.