Metapolítica
Morelia, Michoacán.- El comercio, la seguridad y la industria tecnológica serían algunas de las áreas más afectadas en caso de escalar un conflicto ente las dos superpotencias del siglo XXI, Estados Unidos y China.
Así lo señala un reporte de la agencia Associated Press publicado este día.
Lo peor: dado el irremplazable liderazgo de ambas naciones, las consecuencias también afectarían al resto del mundo.
“El fuerte deterioro continuo en los lazos entre Estados Unidos y China plantea riesgos tanto para los países como para el resto del mundo”, dice AP.
Y recuerda que “en la última escalada, un consulado de Estados Unidos en Chengdu, en el suroeste de China, cerró el lunes obligado por China en represalia por el cierre de Estados Unidos de su consulado en Houston la semana pasada”.
“El fuerte deterioro continuo en los lazos entre Estados Unidos y China plantea riesgos tanto para los países como para el resto del mundo”.
En cuanto al comercio, la agencia señala que ambos países ya han sufrido grandes pérdidas en una guerra arancelaria que estalló en 2018 por las ambiciones tecnológicas y el superávit comercial de Beijing.
“Si las conversaciones para poner fin a la disputa fracasan, el mundo podría enfrentar una presión a la baja sobre el comercio en un momento en que la economía mundial ya se está recuperando de la pandemia de coronavirus”.
En relación a la tecnología, AP sostiene que “los productores estadounidenses y chinos de tecnología de telecomunicaciones, informática, medicina y otros y sus mercados están estrechamente entrelazados. Apple, Dell, Hewlett-Packard y otros confían en las fábricas chinas para ensamblar la mayoría de sus teléfonos inteligentes, computadoras y otros productos electrónicos de consumo”.
Agrega que esas fábricas necesitan chips de procesador y otros componentes de los Estados Unidos, Japón, Taiwán y Europa, por lo que una ruptura inevitablemente interrumpiría el flujo necesario para elaborar equipos utilizados masivamente en todo en mundo.
Y en cuanto al factor militar, afirma que “mientras Estados Unidos ha sido durante mucho tiempo el poder militar predominante en el Pacífico, China ahora tiene dos portaaviones operativos y un arsenal de misiles vistos como una amenaza para los buques y bases estadounidenses en la región”.
En este caso, una escalada en las tensiones militares solo lograría complicar más el ya complejo mapa geopolítico mundial.
Este día el medio argentino perfil.com publicó una entrevista al profesor de la Universidad de Chicago John Mearsheimer, quien aseguró que es posible una guerra entre Estados Unidos y China en 2021.
“China tiene interés en ocasionar problemas de seguridad a Estados Unidos en el Hemisferio Occidental para que tenga que enfocarse en su propio patio trasero y no pueda poner toda su atención en Asia o en la propia China”, dijo.
