Ciudad de México, a 06 de diciembre de 2016.- México tiene un rezago de entre tres y cinco años en el dominio de matemáticas, ciencias y lectura entre los países calificados por la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE).
A 15 años de la aplicación del Programa para la Evaluación Internacional de Alumnos (PISA), los mexicanos de entre 15 y 16 años de edad ni siquiera han logrado alcanzar el nivel de los países miembros de la OCDE.
Los resultados de la prueba PISA 2015 –que se enfocó sobretodo en la evaluación en ciencias– indican que 48% de los estudiantes encuestados sólo recurre a conocimientos básicos de ciencias, es decir que se ubican un nivel 2 de 6, que se establecieron para dicha prueba.
“Al Nivel 2, los estudiantes son capaces de hacer uso de su conocimiento básico de los contenidos y procedimientos de ciencias para identificar una respuesta apropiada, interpretar datos, e identificar las preguntas que emergen de un simple experimento”, describió en una videoconferencia de prensa, Gabriela Ramos, directora de Gabinete de la OCDE, Sherpa ante el G20 y consejera especial para el secretario general.
En las tres áreas, menos de 1% de los estudiantes en México logran alcanzar niveles de competencia de excelencia; nivel 5 y 6; o sea sólo 75 si se toma en cuenta que fueron entrevistados siete mil 568.
En la escala de excelencia, los estudiantes pueden aplicar sus conocimientos y habilidades científicas de una manera creativa y autónoma en una gran variedad de situaciones, incluso en instancias que no les son familiares.
El rezago
La prueba también arrojó que los estudiantes mexicanos obtuvieron un promedio de 408 puntos en matemáticas, 416 en ciencias y 423 en lectura.
Es decir que tuvieron 82, 77 y 70 puntos menos de la media de los países miembros de la OCDE, cuyos valores por asignatura fueron: 490 en matemáticas, 493 en ciencias y el mismo puntaje en lectura.
Ello se traduce en que México tenga más de dos años en rezago por un deficiente dominio en tales materias, si tomamos en cuenta que cada 30 puntos equivalen a un año de escolaridad.
Pero el panorama empeora si nos medimos con Singapur, el número uno de la lista de los 72 países evaluados. Dicha nación obtuvo 564 puntos en matemáticas, 556 en ciencias y 535 en lectura.
La diferencia de puntos con México es de 156, 140 y 112, por cada área referida, por lo que el retraso en años de escolaridad es de 5.2 en matemáticas, 4.6 en ciencias y 3.7 en lectura.
En general, los jóvenes mexicanos de 15 años tienen una diferencia de más de 70 puntos por debajo de los estudiantes en Portugal y España, y una diferencia entre 20 y 60 puntos por debajo de los estudiantes en Chile y Uruguay, pero se sitúan por encima de los estudiantes Brasil, la República Dominicana y Perú.
Niñas, una población vulnerable
En el área de ciencias, los chicos superan a las chicas en ocho puntos, lo cual está por encima del promedio de la OCDE que es de cuatro. Sin embargo, entre los jóvenes con 90% de dominio de las ciencias, la brecha entre niños y niñas es de 20 puntos.
Al respecto, Gabriela Ramos explicó que el bajo rendimiento de las adolescentes no se relaciona con tener menos dominio de sus capacidades, sino por cuestiones de discriminación o estereotipos que las llevan a interesarse en otras asignaturas, así como por falta de caoacitación.