El Comando Central estadounidense dijo que Estados Unidos realizó el ataque con drones contra un miembro de ISIS en Nangahar, quien se cree que está involucrado en la planificación de ataques contra Estados Unidos en Kabul.
El atentado del jueves demuestra que, a pesar de años de ataques y bombardeos por parte de la coalición liderada por Estados Unidos, el grupo conocido como “Estado Islámico de Jorasán” sigue siendo un peligro.
En las últimas 24 horas unas 12 mil 500 personas han sido evacuadas, de las cuales unas 8 mil 500 son vuelos fletados por las Fuerzas Armadas estadunidenses.
“No perdonaremos. No olvidaremos. Los perseguiremos”, fueron las palabras que usó el estadounidense, quien atribuyó el ataque a milicianos del ISIS liberados de las prisiones por el Talibán durante la toma de las principales ciudades del país.
Hasta ahora el movimiento talibán desconoce a los reponsables, afirmó a Sputnik Mohammad Naim, portavoz de la oficina política del movimiento fundamentalista.
Fuentes oficiales del Gobierno de Estados Unidos han informado a Reuters de que se puede tratar de ataques suicidas, aunque las mismas fuentes han añadido que todavía es pronto para determinarlo.
El avión no recibió daños y los 98 civiles afganos que estaban a bordo salieron ilesos. Fueron transportados, por la ruta prevista, a la base aérea de Al Salem, en Kuwait.
El canciller Marcelo Ebrard informó esta mañana que el gobierno de México recibió hoy un grupo de 124 personas, conformado por reporteros que trabajaban en Afganistán y sus familiares, quienes solicitaron visas humanitarias tras la toma del poder por los talibanes.
“La asistencia económica a Afganistán ahora está congelada y permanecerá bloqueada hasta que el gobierno de los talibanes muestre sus intenciones”, dijo el grupo.