El secretario de Seguridad de Estados Unidos se dirigió a los agentes encargados de detener migrantes para deportación que antes consideren el carácter moral de la persona, es decir, si valdría la pena deportar a un padre de familia trabajador que paga sus impuestos y no tiene antecedentes penales.
Se considera que esta podría ser una de las mayores y más rápidas expulsiones estadounidenses de migrantes y refugiados en décadas, ya que el plan se puso en marcha desde el sábado.
El mandatario mexicano dijo que, en vez de resolver el tema migratorio con el uso de la fuerza, “lo mejor es el desarrollo, que haya empleo, y eso lo podemos lograr porque en América se tienen muchos recursos naturales, se tiene bastante avance tecnológico y se tiene algo que es fundamental: fuerza de trabajo. Estamos en la misma sintonía con el gobierno de Estados Unidos”.
El fallo de la juez federal de distrito Cynthia Bashant no tiene un impacto inmediato, pero podría impedirle al gobierno limitar el ingreso de solicitantes de asilo amparándose en el argumento de que carece de recursos.
El canciller Marcelo Ebrard anunció que el 9 de septiembre, ambos gobiernos retomarán estas conversaciones, pausadas desde de 2016, para “promover la inversión, el crecimiento económico y las oportunidades”.
La Casa Blanca también publicó una “Estrategia colaborativa de gestión de migración”, encargada en febrero por Biden para determinar cómo trabajará Estados Unidos con otros países para afrontar los flujos migratorios.
Este anuncio revierte la política implementada por Donald Trump y es más cercana a las que tenía el presidente Barack Obama. A partir de ahora, las embarazadas detenidas recibirán atención médica regular según sea necesario.
La Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza de Estados Unidos reporta que la detección de personas sin documentos creció 7.6% en mayo de 2021, con respecto al mes previo.