“Debido a la actual situación internacional, y en línea con nuestros valores, Grupo Bimbo informa que ha suspendido las ventas de la marca Bimbo en Rusia, así como sus nuevas inversiones de capital y mercadotecnia en aquel país”, dijo la empresa mexicana en un comunicado.
La agresión se da luego de que el presidente de Estados Unidos, Joe Biden, advirtiera el viernes que si Rusia ataca a alguno de los países miembros de la OTAN, se desataría una Tercera Guerra Mundial.
“Apoyaremos a Ucrania, mientras continuamos unidos a nuestros aliados en Europa y enviaremos un mensaje inequívoco: defenderemos cada centímetro del territorio de la OTAN. Tenemos una obligación sagrada con el territorio de la OTAN”, dijo el presidente de EUA.
Despojar a Rusia del estatus de nación más favorecida permitirá a Estados Unidos y a sus aliados imponer mayores aranceles a sus importaciones rusas, intensificando así el aislamiento de esa economía en represalia por la invasión a Ucrania.
“Condenamos con firmeza las sanciones unilaterales que no tienen ningún sustento legal internacional”, dijo el portavoz del Ministerio de Exteriores chino, Zhao Lijian.
El Gobierno de Estados Unidos no se niega a recibirlos, pero es reacio a enviarlos después a Ucrania, puesto que esto podría ser considerado por Rusia como una escalada significativa y amenazante.
Estados Unidos es un exportador neto de energía, esto quiere decir que produce más petróleo y gas del que consume, destacó el presidente estadounidense Joe Biden. Reino Unido dejará de importar petróleo y derivados de Rusia a finales de 2022.
El presidente de Rusia, Vladimir Putin, pidió que el gobierno ucraniano acepte todas sus exigencias, especialmente la desmilitarización de Ucrania y un estatuto neutral para el país.
“Estados Unidos no irá a la guerra con Rusia”, dijo en conferencia de prensa el secretario de Estado de Estados Unidos, Antony Blinken, pero aclaró que se encargará, junto a sus aliados, de que Ucrania dé pelea.
El presidente ucraniano se posicionó en torno al ataque de los rusos a la Catedral de la Asunción en Járkov. “Es uno de los monumentos ortodoxos más antiguos de la ciudad y de Ucrania. Es un lugar sagrado. Pero Dios ve y responde a todo. No hay búnker para sobrevivir a la respuesta de Dios”, aseveró el mandatario.