El Sindicato Único de Empleados de la Universidad Michoacana (SUEUM) logró ampararse en contra de la negativa de la autoridad federal de rechazar su emplazamiento a huelga por revisión contractual.
El gobierno del Estado acordó el secretario general del Sindicato Único de Empleados de la Universidad Michoacana (SUEUM), Eduardo Tena Flores, que durante los próximos días se concluya el pago de aguinaldos y prestaciones de fin de año.
La administración de Cárdenas Navarro “ha sido dura y ofensiva con los agremiados del SUEUM”, sin importar “el daño moral, económico y psicológico causado a ellos y sus familias (…) para su intento fallido de construir un sindicato patronal que obedeciera a sus intereses y buscar destruir al SUEUM”, dijo el líder sindical Eduardo Tena.
El dirigente sindical aseguró que la Auditoría Superior de Michoacán observó no pudo demostrar el destino de más de 200 mil millones de pesos de la UMSNH, y que estas irregularidades “obliga al gobierno de la 4T a ejecutar los procesos legales pertinentes”.
El sindicato solicita un incremento salarial del 10% y 5% a prestaciones. El estallamiento de huelga se fijó para el martes 1 de marzo del 2022 a las 19:00.
Para el líder sindical Eduardo Tena, el rector Raúl Cárdenas “sólo ve sus intereses porque los hemos viso comer en grandes restaurantes, mientras a sus empleados no les paga”, por lo que consideró que es irreconciliable el diálogo.
El dirigente sindical Eduardo Tena, sin embargo, dejó en claro que no hay confianza en las autoridades universitarias, ya que “ni siquiera han sido capaces de dotar de un cubrebocas a los compañeros, pero eso sí reportan millones de pesos gastados en insumos sanitarios”.
"Tenemos la confianza de que vienen mejores tiempos para la Universidad Michoacana y estamos comprometidos a trabajar de la mano con el nuevo gobierno en pro del fortalecimiento de la educación", dijo Tena.
Al respecto el secretario general Eduardo Tena Flores informó que las manifestaciones de los nicolaitas no pararán hasta que se resuelvan todas problemáticas que mantienen hundida a la Casa de Hidalgo y sus trabajadores.
