El testigo de la Fiscalía de EUA dijo que la entrega se hizo en dos pagos en un restaurante en la Ciudad de México, en el periodo de transición de los gobiernos de Vicente Fox y Felipe Calderón, en 2006.
La posibilidad de que el exsecretario de Seguridad Pública testificara se diluyó este lunes, luego de que el juez Brian Cogan respondiera a la defensa que no puede bloquear algunas preguntas de los fiscales.
Lo común es que los defensores aconsejen a sus clientes no testificar, pues eso los somete a un contrainterrogatorio; sin embargo, en casos criminales, la defensa no tiene la obligación de comprobar que el acusado es inocente, sino que los fiscales deben comprobar que es culpable.
El titular la UIF, Pablo Gómez, dijo que el exsecretario de Seguridad Pública desfalcó al gobierno con 30 contratos hechos con diversos órganos de seguridad pública en México. Con el recurso, dijo, adquirió bienes con el fin de “mantener el dinero en situación de lavado”.
Según declaraciones del exsecretario de Finanzas de Coahuila, Héctor Villarreal, el dueño del diario El Universal, Juan Francisco Ealy, y el exsecretario de Seguridad de Felipe Calderón, acordaron pagos millonarios para contrarrestar información de otros medios.
La semana anterior declararon Sergio Villarreal Barragán “El Grande”, quien dio a conocer que el exsecretario de Seguridad Pública recibía millonarios sobornos del capo Arturo Beltrán Leyva, quien incluso llegó a secuestrarlo, según lo revelado.
Nicholas Palmeri, supervisor de docenas de agentes en México, América Central y Canadá, fue destituido a un año de ser director regional de la DEA. Su caso se suma al de otros al interior de la DEA precisamente por conductas consideradas como inapropiadas.
“[A García Luna, director de la AFI], yo lo vi en varias reuniones con Arturo Beltrán Leyva”, respondió Sergio Villarreal Barragán “El Grande” a la fiscal Erin Reid, quien le preguntó para qué, a lo que respondió: “Para pagarle sobornos por parte del Cártel de Sinaloa”.
Recientemente, la DEA dio a conocer que desde 2012 tuvo pruebas para actuar contra García Luna, cuando todavía era funcionario federal, pero se abstuvo de hacerlo, porque una fiscalía estadounidense dijo que necesitaba más pruebas.
El comandante del 65 Batallón de Infantería, el coronel Héctor Miguel Vargas Carrillo, fue asesinado durante una emboscada de sicarios del Cártel Jalisco Nueva Generación. Tenía nueve meses en el cargo, desde que militares asumieron la seguridad de Tierra Caliente.